El ozono es un eficaz desinfectante natural que tras realizar su función se convierte de nuevo en oxígeno, sin dejar rastros.
Actúa contra los hongos, bacterias, ácaros, malos olores, oxigena el aire y lo purifica, desinfectando, de manera rápida y eficaz.
Se coloca un aparato ozonizador en el interior del coche durante un mínimo de 10 minutos, y luego se finaliza la limpieza dejando las puertas abiertas para que se regenere el aire interior del vehículo.
Es un tratamiento aconsejable para vehículos con niños o bebés, profesionales de la alimentación, taxistas, fumadores, y para conseguir una exhaustiva limpieza cuando se transporta animales.